El Karma y el Dharma, actuar por DEPENDENCIA o con RESPONSABILIDAD

A lo largo del día...¿cuantas veces hacemos cosas justificándolas en la necesidad?
TENGO QUE...

La necesidad es una motivación que justifica nuestras acciones a través de cumplir con lo que esperan de nosotros los demás, es decir de cumplir con las expectativas de nuestra familia, de lo que opinan los amigos, lo que valora nuestro grupo social, etc...por lo tanto cuando actuamos porque TENGO QUE no recibimos refuerzo por el logro, porque no estamos tomando una opción personal, sólo estamos cumpliendo con lo que quieren los demás.

¿y cuantas decidimos desde la propia responsabilidad?
VOY A...

Todos nos sentimos completos cuando actuamos como personas libres de nuestros actos y responsables de sus consecuencias.

Las actitudes en las que se basa nuestra conductas parten del miedo o del amor, Karma o Dharma, actitud cerrada o abierta, predestinada o interactiva.
En función de estas actitudes básicas, nuestra biología genera unas hormonas, u otras, y de ellas“dependerá el color del cristal con que miramos lo que acontece en la vida”..
La responsabilidad amplía la libertad y la necesidad la dependencia .

A. Damasio, neurólogo:

Cuando tienes miedo, o estás enfadado, perturbas la fisiología normal, creas conflicto y se generan reacciones como la liberación de cortisol, que se asocia con lo que denominamos estrés y que se fija en los tejidos de manera estable generando rigidez y una posición de alerta permanente.

LA MENTE, que siente lo que le está sucediendo al cuerpo, interpreta estos síntomas como una necesidad de supervivencia básica, reacciona tratando de preservar la vida, y con ello refuerza la mentalidad que origino la perturbación inicial...se inicia una cadena de acción-reacción por miedo

J. Dispenza, (Y tú qué sabes?) especialista en funcionamiento del cerebro :

La personalidad se convierte en un problema cuando las emociones que memorizamos se derivan de los químicos de la supervivencia; cuando son reacciones no hay libertad; así que la culpa, la ira, la vergüenza, el miedo...etc actúan sobre la química del cerebro, tensan nuestros músculos y condicionan nuestra manera de pensar, de interpretar las situaciones y nuestras posibilidades de actuar sobre ellas.

Un pensamiento supervivencial REPETIDO GENERA UNA MENTALIDAD  miserable que nos autolimita. 

Es cuando el timón de nuestra vida, en lugar de manejarlo el Dharma y el amor, lo dirijen el Kharma y el miedo...